Aula de Palabras

Aula de Palabras
La magia de leer en aulas fantásticas
Este Blog intenta ser un espacio para compartir experiencias y reflexiones en torno a la Lengua y la Literatura y su función educativa sistemática y asistemática.
Las palabras nos muestran, dan cuenta de la configuración de nuestro mundo íntimo y público.
El lenguaje y el arte literario constituyen armas poderosas de formación educativa para la sociedad.



sábado, 24 de abril de 2010

Leyendas Celtas


La Cierva Dorada
(vieja leyenda tradicional celta)
Durante una cacería de sus famosas cacerías, Finn Mc Cumhaill, vió cruzar repentinamente la senda que seguían, a una hermosa cierva dorada.
Los perros se lanzaran en su persecución y luego de varias horas, en un fresco valle, la cierva, sin duda muy cansada por la carrera, se detuvo y cayó al suelo.
Como era de esperar, los perros se lanzaron hacia ella, pero para asombro del cazador, en lugar de atacarla, comenzaron a jugar a su alrededor, lamiendo su cara y su cuello.
Finn, asombrado por la situación, dio órdenes de que nadie la dañara, y todos comenzaron el regreso hacia el castillo, con la cierva y los perros jugando amorosamente mientras los seguían.
Esa noche, Finn despertó sobresaltado. Junto a su cama, la mujer más bella que jamás se hubiera visto le hablaba: - Yo soy Sadv, - le dijo- soy la cierva que seguiste hoy. Como no quise brindarle mi amor al druida del Pueblo de las Hadas, me hechizó condenándome a llevar esa forma, de esto hace ya tres años. Pero uno de sus esclavos, un buen amigo, me dijo que si lograba despertar la compasión de algún caballero, recuperaría mi forma original.
Sadv, no solo había logrado la compasión de Finn, en el momento en que la vio, él se había enamorado perdidamente de ella.
Juntos vivieron hasta que una mañana le llegó la noticia de que se avecinaba un ataque por mar; los Hombres del Norte se encontraban en la bahía de Dublín y venían hacia su dominio.
Sólo siete días permaneció Finn fuera de su casa. Al regresar, no vió a Sadv esperándolo, entonces preguntó a sus sirvientes por ella. el más fiel y servicial, con mucha pena le dijo: - Anteayer, nos pareció veros llegar, y todos nos apresuramos hacia el portal, pero en cuanto la Reina Sadv lo cruzó, un fantasma apareció la cubrió con niebla y en su lugar sólo quedó una cierva dorada. Los perros la acosaron y no le permitieron volver al portal, obligándola a huir hacia el bosque. No la volvimos a ver más.
Finn se estrujó las manos, y se retiró con muchísimo pesar a sus habitaciones, durante siete años la buscó por toda Irlanda.
Finalmente, siguiendo un rastro de jabalíes en los montes de Ben Gulbann, oyó que los perros ladraban furiosamente. Allí descubrió un niño desnudo, de largos cabellos rubios.
Finn y sus hombres alejaron a los perros, y condujeron al niño al castillo. Cuando pudo hablar, contó que nunca había conocido a sus padres, sino sólo a una bella cierva dorada, con quien había vivido en un valle profundo y hermoso hasta que una tarde descendió una niebla espesa, cubrió a la cierva, y la hizo desaparecer de su lado.
Finn comprendió que la cierva no era otra que su amada Sadv, y este niño, su hijo.

Versión: Mirta Rodriguez

Fuente de la imagenn: http://www.culturaspopulares.org/textos5/articulos/suarezlopez_archivos/image041.jpg

Leyendas del Mundo


La leyenda de san Jorge y el dragón

Retablo
Jaume Ferrer II (s. XV). Retablo. Escuela Catalana. Ayuntamiento de Lleida. Foto: AISA.

Según la tradición popular, San Jorge era un militar romano nacido en el siglo III en la Capadocia (Turquía). El santo, que servía bajo las órdenes del emperador Diocleciano, se negó a ejecutar un edicto del emperador que le obligaba a perseguir a los cristianos y por esta razón fue martirizado y decapitado por sus coetáneos. Muy pronto se empezó a venerar como santo en la zona oriental del Imperio Romano y enseguida aparecieron historias fantásticas ligadas a su figura.

La gesta de san Jorge y el dragón se hizo popular en toda Europa hacia el siglo IX bajo el nombre de "Leyenda áurea" y fue recogida por el arzobispo de Génova, Iacopo da Varazze, más conocido como Iacobus de Voragine, en 1264, en el libro 'Legenda sanctorum'. En esta versión, sin embargo, la acción transcurría en Libia.

La versión de la leyenda más popular en Cataluña explica que en Montblanc (Conca de Barberà) vivía un dragón terrible que causaba estragos entre la población y el ganado. Para apaciguarlo, se sacrificaba al monstruo una persona escogida por sorteo. Un día la suerte señaló a la hija del rey, que habría muerto de no ser por la aparición de un bello caballero con armadura que se enfrentó al dragón y lo mató. La tradición añade que de la sangre derramada nació un rosal de flores rojas.

Esta misma leyenda, con ligeras variaciones, se repite en las tradiciones populares de Inglaterra, Portugal y Greciahttp, entre otros países

Fuente: http://www.gencat.cat/catalunya/santjordi/cas/llegenda.htm

23 de abril, Día Internacional del Libro



Mi vida entre Libros





Viví entre libros mi infancia: mamá traía siempre en su cartera un libro de regalo.Me acostaba y (tapadita con mi colcha a cuadros y abrazada con mi osito de piel azul) pedía una y otra vez que me contara "El pajarito remendado", cuentos de animales y también algún clásico, esos de Andersen, de Grimm, el Pinocho de Carlo Collodi ( infaltables- por supuesto- Cenicienta y Blanca Nieves porque son cuentos para nenas, porque huelen a perfume, aunque sean crueles).

El patio de casa se transformaba en bosque, entonces yo era: hada, princesa, reina de corazones, la sastrecilla valiente, yo era una pajarita remendada que salía de la panza del rey, volvía a la vida después de la muerte.

Alguna vez quise escribir en el país del no me acuerdo.Quise empezar un cuento con Había una vez... , pero entonces Plaf, y más ¡¡¡PLAF!!!!!.Me di cuenta de que había nacido para lectora, que eso de escribir era para los escritores verdaderos, que pocos eran beneficiados con la trascendencia y se volvían inmortales, fue así que seguí leyendo.

Un día, mi vida se pobló de personajes de libros de todos los géneros, y todos los autores, desde ese momento parlotean en mi biblioteca.

Los libros me regalan la posibilidad de transformarme en la Dido que duerme con Eneas en una cueva, también tejo un sudario y espero a Ulises, soy La Maga que creó un Cronopio con acento francés, la Karenina de Tolstoi, soy TODOS y NINGUNO.¡Soy lectora! , leo para que otros también lean.

Vivo en un reino que tiene lagunas de libros, islas que huelen a papel, besos de tinta, llanuras con letra capital. Vivo en una mega ciudad libresca, en la que el tránsito se congestiona.

Los libros y yo nos amamos.Ellos me dan el placer más grande que puede tener todo hombre: ¡me hacen libre!